Por ello os vamos a dar una serie de recomendaciones para enfrentar de la mejor manera estas situaciones.
Comer sin gluten en el colegio o la guardería
Cuando un alumno es diagnosticado de celiaquia, los padres o tutores deberán llevar al centro el certificado médico correspondiente, para que el personal del mismo sea conocedor del menú apto para celiacos que debe consumir el alumno. Es el centro el que tiene que programar dicho menú mensual sin gluten, no pudiendo negarse a facilitarlo. Para saber más sobre los menús sin gluten en los colegios podéis visitar el niño celiaco en el colegio.
Además los padres o tutores del alumno podrán acceder si lo solicitan a la información de los productos utilizados en la realización del menú. Tampoco se podrá requerir a los padres el llevar su propia comida sin gluten salvo en el caso de que se pruebe que las instalaciones del centro no sean seguras para realizar un menú celiaco. Algo poco frecuente puesto que las cocinas de los colegios y guarderías deben cumplir con las condiciones para llevar a cabo estos menús.
Las instalaciones del comedor deben ser adecuadas para manipular y cocinar dichos alimentos. En el caso de que no sea así, el centro deberá adecuar un espacio exclusivo para su preparación.
Comer sin gluten en el restaurante
Lo primero que debemos hacer para recibir un servicio correcto es comunicar nuestra condición de celiacos. Los trabajadores del local pueden pensar que basta con eliminar el pan o el trigo pero pueden no tener en cuenta la contaminación cruzada.
Debemos también ser especialmente cuidadosos con los cubiertos. Estos no deben de haber tocado ningún alimento con gluten previamente, por ejemplo un cuchillo con el que ha sido cortado el pan.
No debe darnos vergüenza preguntar a los camareros acerca de los ingredientes de determinados platos o los pasos llevados a cabo en su elaboración.
También es una buena alternativa acudir a restaurantes que conozcamos o que sepamos que ofrecen menús seguros para personas celiacas.
En celebraciones familiares como bautizos, bodas o comuniones es imprescindible avisar a los organizadores del evento de que necesitamos una dieta sin gluten, aunque generalmente los restaurantes con experiencia en estas celebraciones suelen tener en cuenta a las personas con alergias y/o intolerancias.
Comer sin gluten en en el hospital
Debemos avisar al personal sanitario de nuestra enfermedad celiaca. Aunque lo más habitual sea que el centro hospitalario disponga de un menú sin gluten, así como disponen de un menú necesario para la salud de cada paciente, como las comidas sin sal o sin azúcar, a veces estos centros no gozan de todas las opciones puesto que estos menús son realizados por catering y tienen un número de platos limitado.
Comer sin gluten en el avión
Las opciones de menú sin gluten dependen de la compañía. Por tanto debemos avisar de nuestra condición de celiacos cuando compramos el billete para que las compañías lo tengan en cuenta en el momento del vuelo. También es recomendable recalcarlo al adquirir la tarjeta de embarque y avisar al personal de cabina al subir al avión. Para saber más puedes leer nuestro artículo los nuevos menús sin gluten de Air Europa
También podemos llevar algún alimento sin gluten por si finalmente el menú no es apto para celiacos. Es importante informarse de la normativa de seguridad para pasar la comida por el control de seguridad de los aeropuertos.
Antes de comenzar nuestras vacaciones es aconsejable contactar con la asociación de celíacos del lugar donde las vamos a disfrutar, para obtener información acerca de dónde podemos comer de forma segura así como también de establecimientos donde podemos comprar alimentos libres de gluten.
Comer sin gluten en fiestas de cumpleaños
Si la fiesta de cumpleaños se celebra en el centro escolar, es esencial que los profesores y los compañeros sean correctamente informados sobre la enfermedad celiaca y sobre lo que puede comer el alumno, antes de preparar la comida. Sería recomendable proporcionar golosinas o galletas sin gluten al profesor para estas ocasiones.
Si la fiesta de cumpleaños es fuera del colegio, lo mejor es hablar con los organizadores de la misma para que adecuen el menú para la persona o personas celiacas. Alguna de las propuestas serían (aceitunas, jamón cocido, fruta, patatas fritas compuestas sólo por patatas, aceite y sal o zumos naturales).
Aunque no es lo ideal, también podemos optar por llevar nuestra propia comida. Por ejemplo es complicado que las tartas de cumpleaños sean sin gluten, una buena idea es tener trozos de tarta congelados para poder llevar en éstas ocasiones.
Comer sin gluten en excursiones o campamentos infantiles
Cuando nuestro hijo realice una excursión con el centro educativo y no pueda llevarse comida apta para celiacos, los padres deben informar a los responsables de la preparación del picnic para orientarles acerca de las diferentes marcas sin gluten de alimentos tan habituales como galletas, embutidos, chocolates o pan. Es absolutamente necesario que esta información se actualice cada vez que se organice una salida, porque estas marcas pueden haber cambiado.
También en el caso de campamentos o granjas escuela, los padres deberán trasladar la información acerca de la dieta sin gluten de su hijo a los responsables de la cocina.